5 de noviembre de 2017

All about Eve



Capítulos: 20 (1 hora)
Año: 2000
Sinopsis: Cuenta la historia de rivalidad entre Jin Sun Mi y Heo Young Mi, dos chicas de estratos sociales distintos, la cual empieza cuando el padre de Sun Mi trae a su casa a la huérfana Young Mi, al ser en parte responsable de la muerte del padre de ella. Young Mi está decidida a salir adelante como sea y convertirse en presentadora, incapaz de rendirse ante la suerte perpetua que parece tener Sun Mi, quien sin embargo sufre al darse cuenta de que el hombre del que esta enamorada, Kim Woo Jin, prefiere a su rival. Decidida a olvidarle marcha a Inglaterra donde conoce a Yoon Hyong Chul, que se interesa en ella



El drama más antiguo de todos los que he visto, un clásico coreano, entretenido a ratos, por donde se desarrolla, el mundo de la televisión, en concreto de los presentadores pero que falla en presentar a algunos arquetipos comunes de los dramas.

Jin Sun Mi es una chica que ha tenido siempre suerte, es huérfana de madre, pero cuenta con el cariño y apoyo económico de su padre, quien se desvive por ella. Pero hay algo que no parece que logrará y es que su amor por su amigo de la infancia sea correspondido y menos cuando una extraña irrumpa en su vida y empiece a lograr destacar en todo lo que se propone. Sun Mi es una simplona, en el drama dicen que tiene un gran corazón, pero para mi que como cree la mala de la historia tiene una excesiva suerte para lo poco que se esfuerza. Para muestra de ello es que el padre la manda a Londres a estudiar inglés para ver si se le pasa la decepción amorosa y ella se dedica a pensar todo el rato en ello, que plasta. Además de que me parece que tiene una tontería en el cuerpo más propia de una adolescente, que de una chica que está en plena adultez, pero bueno, será por lo protegida que ha estado de todo. Se supone que el personaje tiene que ser de tal manera que siempre estés de su lado, pero es imposible identificarse con ella y más cuando ni hace caso al protagonista. Lo confieso Sun Mi me cae mal.

Su contraparte y enemiga acérrima será Heo Young Mi, una chica que no lo ha tenido nada fácil, con una madre que la abandono de niña y un padre que a raíz de eso se volvió alcohólico y que la maltrata. Young Mi ha desarrollado una férrea voluntad con el objeto no solo de sobrevivir sino de lograr llegar a lo más alto. Es una villana con motivos, a la que entiendes casi todo el tiempo en su forma de proceder, que ha sufrido lo peor desde niña y que está dispuesta a todo con tal de conseguir lo que quiere, eso la enfrenta a Sun Mi, que como siempre lo ha tenido todo es mucho menos disciplinada. Young Mi logra algo que la otra no y es que Woo Jin se enamore de ella hasta las trancas y a ella le pasa lo mismo, porque con él se siente a salvo, es una persona que la acepta tal y como es, pero por miedo a no lograr destacar y quedar como la segundona, le acaba abandonando para conquistar al protagonista.

Y ese es Yoon Hyong Chul, con quien Sun Mi se encuentra cuando huye a Inglaterra de la relación entre Young Mi y Woo Jin. Él traba amistad con ella porque no hay muchos coreanos por allí y le enseña la ciudad, una de las mejores partes del drama porque vemos Londres de forma espectacular. Poco a poco, Sun Mi le va teniendo más confianza a Hyong Chul y él se acaba convirtiendo en su confidente y su paño de lágrimas, me gusta la amistad que tienen y probablemente sea de lo poco que pueda rescatar de Sun Mi, que parece verdaderamente obsesionada con Woo Jin. Hyong Chul se enamora de ella, no tengo muy claro el porque, supongo que es alegre y sincera pero de verdad que es un plomo de chica. Lo que Sun Mi no sabe es que Hyong Chul es el díscolo hijo de un millonario propietario de una cadena de televisión. El protagonista tiene una relación pésima con él, porque el padre dejo a la madre, que era la que tenía la pasta y se casó con otra y tuvo un hijo, pero parece que ya andaba con ella antes de divorciarse de la madre, algo que Hyong Chul no le perdona. Cuando la madre se muere, él vuelve a Corea y acepta ocupar un lugar preponderante dirigiendo la cadena de televisión, porque claro el padre solo tenía el control por estar casado con la madre que era la verdadera dueña y ahora todo pasa al hijo, quien tiene un enfrentamiento con uno de allí que quiere ser el que mande, sin mucho recorrido porque sabemos que Hyong Chul es muy inteligente y eficiente en su trabajo y nadie le podrá pisar el puesto.

Por último está Woo Jin, el objeto del amor de las dos chicas del drama. Él tiene un cariño fraternal por Sun Mi pero se enamora con locura de Young Mi, quien es una luchadora, aunque a veces haga perrerías y así sigue todo el drama. Por más que Sun Mi lloriquee y se ponga plasta, no hay tu tía. Woo Jin siempre está del lado de Young Mi, llega a ser consciente de la tremenda ambición de ella, pero no puede evitar quererla porque sabe que ha sufrido. La protege y es como un escudo para Young Mi, quererla se convierte en el motor de su vida y cuando ella decide dejarle, a pesar de seguir enamorada de él, para conseguir sus metas profesionales y medrar intentando conquistar a Hyong Chul, Woo Jin se queda destrozado y se dedica a intentar convencerla de lo contrario. Acabando convertido en un borracho, culpa que le echan Sun Mi y la idiota de madre de Woo Jin a Young Mi, como si ella le hubiera puesto la botella en la mano, cuando al haber sido su padre un borracho maltratador es lo que ella más odia.

Aunque Young Mi es supuestamente el arquetipo de villana, a mi me ha gustado más que la protagonista, porque le suelta verdades como puños a esta. Young Mi no se rinde y aunque tenga todo en contra sigue luchando. Se parte el lomo por lo que quiere, que es ser presentadora, igual que Sun Mi, pero mientras la primera va escalando por méritos propios, Sun Mi lo hace porque Hyong Chul a veces la ayuda y otras porque cae bien a la gente de la cadena, porque tiene corazón, en mi opinión tiene una falta de profesionalidad enorme, que no se puede suplir ni con corazón ni con simpatía. El factor suerte lo tiene excesivamente de su lado y le salva el culo demasiadas veces. Hacia el final tienen que hacer que Young Mi se vuelva más mala para que no te pongas de su parte, pero salvo por un par de momentos, lo estuve, la petarda de Sun Mi está más pendiente de Woo Jin que de su carrera como presentadora, esa que se supone que le importa tanto.

En cuanto a las relaciones amorosas, no hay besos, solo uno al final, es un drama de principios de los 2000, entonces apenas se habían visto fuera de Corea y eso se entiende, creo que la evolución que se puede ver desde este dorama a uno de este año es enorme en ese aspecto. Entre las parejas que se forman me quedo con la de Young Mi y Woo Jin por la simple razón que se nota a leguas que están enamorados, aunque no se besen, pero si se abrazan y se lo dicen, a pesar de que Young Mi prefiere renunciar a algo tan valioso como el amor de Woo Jin por su carrera, ella si le ama y se nota que sufre como una condenada, pero esa exigencia que ella misma se ha auto impuesto le impide "conformarse" con menos. En la "pareja" de Hyong Chul y Sun Mi se ve todo el tiempo que él esta enamorado y que ella le tiene cariño, pero nada más, está emperrada con Woo Jin y hasta que no ocurre un hecho determinante en la historia ella no se decide a estar Hyong Chul, demostrado que es por eso que le acaba aceptando y no porque este realmente enamorada de él. Una pena después de todo lo que aguanta él, siendo todo el rato su apoyo cuando las cosas no le salen bien y el hombro en el que llora Sun Mi su corazón roto. Llega un punto en que a Hyong Chul se le hace totalmente insoportable seguir así y prefiere cortar relación con ella para no sufrir más.

Otros puntos negativos, el hecho de que haya una subjefa o algo así que este fastidiando a otra presentadora, que está enamorada de Hyong Chul y es amiga de él, solo porque es ambiciosa, como si fuera terreno exclusivo de los hombres el tener unas altas aspiraciones profesionales. Por supuesto esta presentadora ve a Young Mi un reflejo de ella misma y la apoya mientras que la subjefa se pone del lado de Sun Mi, otra lerda como ella. La presentadora se da cuenta de que Sun Mi tiene pocas dotes para ser presentadora y le coge manía incluso antes de saber que Hyong Chul está enamorado de ella. Tampoco me gusta que la madre de Woo Jin trate desde el mismo momento que conoce a Young Mi como si fuera basura, solo porque es huérfana y no tiene donde caerse muerta, como si por eso no valiera como persona. Luego comenta que al igual que Sun Mi, esperaba que esta se casara con el hijo, pero aun así no tiene justificación. La señora además es idiota, jactándose de saber el tipo de mujer que es Young Mi en realidad, pero haciendo todo lo que no se debe hacer si lo que quieres es que tu hijo no este con ella, lo dicho, una estúpida de tomo y lomo.

Pasable propuesta, una villana cuya historia destaca por encima de todo lo demás, realmente solo me importaba ver como se desenvolvía el personaje, el cual se come con patatas a la insípida Sun Mi. El protagonista desperdiciado de paño de lagrimas de la pesada de la protagonista, interesante como muestran los entresijos del mundo de la televisión.

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