22 de noviembre de 2017

The Moon that embraces the Sun



Capítulos: 20 (1 hora)
Año: 2012
También conocida como: The Moon that conceals the Sun, The Sun and the Moon
Sinopsis: Heo Yeon Woo es una noble que es prometida en matrimonio al príncipe heredero Lee Hwon, ambos se enamoran. La dicha les dura poco, pues antes de poder casarse, se orquesta una intriga que acaba, a ojos de todos, con Yeon Woo muerta. Ocho años después, el ahora Rey conoce a Wol, una mujer chaman por la que se siente atraído sin entender porque. Ella es realmente Yeon Woo, pero sin recuerdos de su pasado. El reencuentro revive el amor que se tuvieron, ahora deberán luchar para poder hacerlo realidad



Un drama precioso de ver, que te mantiene intrigada, emocionada y sobretodo extasiada por la belleza de todo lo que se muestra en pantalla, la ambientación como buen drama de época está muy cuidada.

El príncipe Lee Hwon esta entrando en una edad en la que debe casarse. La candidata ya ha sido elegida, pero el chico, que no es nada tonto a sus 15 años, ya le ha echado el ojo a una chica en concreto y provoca una protesta para que la elección sea lo más transparente posible y así es escogida la chica que a él le gusta. Lo que el príncipe desconoce es que ha torcido los planes de su malvada y ambiciosa abuela, la reina viuda, quien espera seguir controlando el reino por medio de la esposa y futura reina del heredero al trono. Así que la princesa escogida es borrada del mapa para desgracia del príncipe. Ocho años más tarde, el príncipe ahora rey, está casado con una mujer a la que detesta, hasta tal punto que ni se ha molestado en consumar el matrimonio. El joven curioso e intrépido que solía ser se ha transformado en un bloque de hielo, que destila ironía y desdén a partes iguales, mientras lidia con los asuntos reales y sus ambiciosos ministros. Solo hay algo que no ha cambiado, el amor que aun profesa por su princesa muerta y entonces se topa con una humilde mujer, una chamán, que le recuerda a ella y a la que se empeña en mantener a su lado, enamorándose poco a poco de ella.

Esta chaman, Wol, fue otrora no hace mucho tiempo la noble Heo Yeon Woo, prometida del príncipe, a quien quería y cuyo amor era plenamente correspondido. Una niña de 13 años monísima y lista a más no poder, que tras lograr por méritos propios ser declarada prometida del príncipe, es arrancada con malas artes, magia negra, del lado de este. Pero con lo que no cuentan los malos es que la niña que ellos creían muerta, solo fue pasada por muerta y salvada por la Gran Chamán, que protegió su vida por cierta deuda del pasado con la familia de la niña. Tras el hechizo, Yeon Woo pierde la memoria de su vida anterior y abraza su nuevo rol como la chamán Wol, pero dado que está destinada a ser la Luna que proteja al Sol, su camino vuelve a cruzarse con su amor y entonces, de nuevo surgen las conspiraciones y los tejemanejes para separarlos, que ellos, ahora como adultos, deberán enfrentar si quieren esta vez que su destino se cumpla.

El tercer vértice de este triángulo o mejor cuadrado es el príncipe Yang Myung, hermano mayor del protagonista, que solo por haber nacido de una concubina y no de la reina, se ve privado de todo. Expulsado del palacio, sabe que está solo, que no cuenta prácticamente con nadie. Para él lo peor es pensar que su padre, el rey, no le quiere, cuando este lo que hace es fingir que no le importa para protegerle de las maquinaciones de la Reina Viuda, que no dudara en quitarle de en medio si piensa que estorba el camino de su hermano, porque solo puede haber un Sol en el cielo. Desde el principio es un personaje con el que empaticé, alguien que esconde tras una actitud relajada y una sonrisa perpetua una tristeza infinita, un trotamundos que no para mucho tiempo en el mismo sitio para no sentirse siempre aislado. Enamorado de Yeon Woo, verá de nuevo malogrados sus deseos cuando ella sea escogida como consorte del futuro rey y encima sabiendo que ella está enamorada del hermano. Siendo además excesivamente desdeñosa y grosera con el pobre Yang Myung, sin que expliquen nunca porque una niña que es tan respetuosa y agradable con todos, con este chico es tan petarda. Lo cual deja un poco en pañales porque él está tan enamorado de una chica que lo trata tan groseramente, menos mal que de adulta si se porta con él como es debido. La "muerte" de ella será lo que ponga una cruz definitiva entre los hermanos, pues Yang Myung culpara siempre de la perdida de Yeon Woo a Hwon, a pesar de que los hermanos antes se querían mucho y en realidad, seguirán queriéndose.

Y por último está la hija de uno de los malos, uno de los ministros aliado de la Reina Viuda, Yoon Bo Kyung, ambiciosa y mala desde tierna edad, al conocer al príncipe heredero se encapricha de él y más tarde se enamora, queriendo casarse con él, algo que le conseguirá su padre y la vieja reina. Para su desgracia, aunque logra parte de sus objetivos, nunca obtendrá lo más importante: el amor del rey. Quien no pierde la oportunidad de fastidiarla y rechazarla de continuo, algunas de las mejores escenas son esas, ver como le da en los morros a la bruja esta, que rabia y rabia, porque en el fondo debe ser horrible estar casada con ese hombre tan guapo y no poder catarlo nunca, encima sabiendo que él sigue enamorado de otra. Pero eso le pasa claro, por usurpar un lugar que no le pertenece. Dándose cuenta más tarde de que solo ha sido un peón, que en cualquier momento podría ser sacrificado por su todavía más ambicioso y despreciable padre.

La historia de amor, que empieza dulce para luego resurgir con más fuerza, sobretodo por parte de él, que la quiere con locura, está bastante bien. Me creo ese amor desde jóvenes, porque no estamos hablando de dos críos de 10 años, sino de un par de adolescentes que ya empezaban a asumir cargas de adultos. Mejor ella en su versión adolescente que adulta, la actriz me pareció un tanto estática para lo que exigía el personaje, está bien cuando la protagonista no sabe quien es, pero luego no entendí esa forma de actuar tan fría ante el hombre de su vida, además de que no se parecía físicamente nada a su versión más joven. Y él, que diferencia con el personaje del alien. Aquí está inmenso, en un papel que le permite moverse en distintos registros, el rey burlesco, que siempre les esta sacando la vuelta a los ministros por intentar controlarle, un hombre listo, huraño, amargado y que luego vemos como el más amoroso o sufridor, como llora por favor que parte el alma. Algo que me gusta y que ya he dicho varias veces porque me fascina, es la capacidad que tienen los actores coreanos para expresar todo lo que le pasa a su personaje solo con los ojos, lo destaco de nuevo, porque me parece tan difícil y por eso lo valoro tantísimo. Me ha gustado mucho este actor en este papel, me ha enamorado y lo mismo digo del actor que hace de su hermano. Tanto en la versión adolescente como en la adulta, los personajes de los príncipes han estado estupendamente interpretados, no pareciendo realmente que eran actores distintos, ellos si se parecen, produciéndose un relevo perfecto.

Rodeando a los cuatro protagonistas están los buenos, como los amigos del príncipe Yang Myung que luego pasan a servir a su hermano, Woon un extraordinario y atractivo espadachín, aunque de adulto le coloquen esos pelos que le quedan fatal y el hermano de la protagonista Heo Yeon, un chico que destaca por su extrema inteligencia y por su atractivo, aunque cuando le vemos de mayor ni parece tan listo ni tan guapo. El eunuco que siempre ha estado con el príncipe y luego rey, que le quiere como si fuera su hijo, porque prácticamente lo ha criado él, tienen una relación de lo más entrañable toda la historia. O la chamán, que acaba queriendo a Wol/Yeon Woo como si fuera su sangre y a la que lleva protegiendo ocho años.

Entre los malos destaca el ministro y la Reina Viuda ambiciosos al extremo, a él nada lo redime, es que no le importa ni la hija. A ella parece que si le importa su familia, pero está tan obsesionada con el poder que no duda en quitar del medio a quien sea con tal de que no le estorbe. El hecho de que su hijo tenga miedo de que pueda acabar con la vida de Yang Myung, a pesar de ser su nieto también, hace que lo aleje constantemente a pesar de que le quiere. La muy bruja hace y deshace pensando que el nuevo rey no se atreverá a tocarle un pelo, pero por suerte, el protagonista no deja que eso del deber filial le pare los pies y hace lo que debe hacer para poner todo en su sitio.

Luego hay un personaje que se supone es de los buenos, pero para mi es mala. Se trata de la princesa Min Hwa, hermana de Hwon y de Yang Myung. Esta chica desde niña es estúpida y caprichosa. Se enamora a primera vista de Yeon, quien es designado maestro del príncipe heredero, la mocosa se emperra en casarse con él, su padre se lo niega porque piensa y con razón, que un hombre tan inteligente no solo debe educar al príncipe heredero sino ser luego su consejero cuando este sea rey. Porque si se casa con la princesa, la ley dicta que debe apartarse de toda actividad política para que no se le considere un obstáculo para el rey. Por supuesto la princesa idiota no piensa ceder, entonces es usada por su abuela, quien le promete que le conseguirá a ese chico si la ayuda, participando la niñata esta en el ritual que "mata" a Yeon Woo. Ya de mayor, la chica, que no tiene una pizca de cerebro, solo piensa en estar con el marido, agobiándolo y siendo el ser más plasta del mundo, sin pensar un segundo que su esposo y su suegra han sufrido mucho con la perdida de Yeon Woo, siendo tan infantil y feliz como si nada hubiera pasado. Es cierto que de niña, ella no sabía lo que había hecho, pero de adulta sí y cuando se la confronta sobre ese asunto, la asquerosa tiene la cara de decirle a su propio hermano el rey, el principal afectado, que ella solo lo hizo para conseguir a Yeon y que, agarraos, lo volvería a hacer. Vamos que además de ser una estúpida y una pesada, encima solo le importa conseguir sus objetivos y si los demás sufren las consecuencias y son desgraciados por su causa, a ella le resbala. Poco castigo obtiene para lo que se merece, que era la muerte, en mi opinión, más mala aun que los malos oficiales porque esos carecían de escrúpulos, pero esta encima va de buena por la vida, ocultando todo el mal que ha hecho y sin arrepentirse ni un ápice.

La actitud egoísta y malcriada de la princesa idiota destaca aun más porque luego hay un personaje, Seol, que es todo lo contrario, una criada que es amiga de Yeon Woo y que está enamorada del hermano a tal punto que, cuando la protagonista desaparece tras ser dada por muerta, ella se mantiene fiel a su lado, cuidándola porque se lo había prometido a Yeon. Alguien que no tiene esperanzas de que su amor sea correspondido y que se conforma con que el hombre que ama sea feliz y nada malo le pase, vaya diferencia. Además de que Seol es una luchadora, que aprende por iniciativa propia a usar la espada, para proteger a quienes quiere. Hay ciertos recovecos, como el destino final de algunos personajes, que hacen que no pueda decir que me ha encantado al cien por ciento este drama pero si me ha gustado bastante y merece la pena verlo porque su visionado es bastante emocionante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario