Answer me 1997

Capítulos: 16 (de 30 minutos a 1 hora)
Año: 2012
También conocida: Reply 1997, Respond 1997, Answer to 1997
Sinopsis: La historia está ambientada en la cultura de los fans extremos que surgieron en la década de los 90, cuando los grupos de idols tomaron el escenario y el K-Pop empezó a florecer. Nos relata la vida de seis antiguos amigos de un instituto de Busan y como al reunirse en 2012, esto trae a la memoria a sus yos adolescentes de 1997, trasladándose desde ese año al presente, vamos conociendo las experiencias vitales que transformaron a Sung Si Won, una fanática del grupo HOT, y a sus cinco amigos en lo que son hoy día



Pensar que no quería ver este dorama porque pensé que era aburrido, ¿en qué cabeza cabe? Menuda sorpresita me he llevado y es que estamos ante una historia universal: el paso de la adolescencia a la adultez.

Lo mejor para describir este dorama es decir que trata de la vida de personas normales y corrientes, aunque la historia este ambientada en Corea, nos habla de un grupo de adolescentes con las inquietudes naturales de su edad y a los que les ocurren cosas normales, como las que nos pasaban a mí y a cualquier persona a esa edad, no esperéis grandes momentos dramáticos y tremendas desgracias, porque aunque aunque les pasen cosas malas, también les pasan cosas buenas, ríen, lloran, en este dorama no hay un género predominante, hay drama, comedia, romance y en general, es la vida en estado puro.

El eje de la historia está marcado por Sung Si Won, una adolescente promedio que vive con verdadera pasión el fenómeno fan que empezó a germinar en los 90, con los primeros grupos de K-pop, el cual, como todos los que seguimos este mundo sabemos, ahora es una industria boyante y millonaria, pero que entonces comenzaba y que fue un boom, yo equiparo, en lo que a música respecta, esos 90 coreanos con los 80 españoles. Si Won vive para su grupo HOT y como ese es el marco de la historia, aunque no el único, tiene escenas de autentica locura fan. Yo también he tenido en mis tiempos adolescentes un grupo favorito, pero admito que, en este aspecto de Si Won, fue en el que menos pude sentirme identificada con ella, porque nunca he llegado a esos niveles de fanatismo, hace cada locura por su grupo idol que a mi me dejaba ojiplática. Por lo demás, Si Won es bastante normal, una chica a la que no se le dan especialmente bien los estudios, pero que es una buena amiga, que escucha, que acepta a los demás y que no los juzga, que es sincera consigo misma y con sus amigos, leal y que con sus sentimientos es muy clara. Me gusto porque en ningún momento la sentí forzada, era una persona que empezaba a madurar, a ver más allá de su zona de confort y a darse cuenta de lo que realmente quería en la vida, no es perfecta, es gritona y algo agresiva con su amigo Yoon Jae, pero como la gente normal tampoco es perfecta y tenemos defectos, a mi ella siempre me cayó bien, por fin una protagonista que no dan ganas de estamparla porque es una pánfila.

Del resto de amigos destaca sobretodo Yoon Yoon Jae, que conoce desde que nació a Si Won y que al ser él y su hermano huérfanos, están todo el día metidos en la casa de Si Won, porque los padres de ambos eran muy amigos y para los padres de Si Won, Yoon Jae y su hermano, son dos hijos más. Yoon Jae arrastra e intenta mantener oculto su amor por Si Won, un amor que aparece "de repente" y que al pobre le hace sufrir, porque, aunque para ella es alguien muy importante en su vida, es como si fuera un mueble más de la casa, es su amigo pero en ningún momento Si Won lo ve como una posible pareja. Para más inri, el hermano de Yoon Jae, Tae Woong, también se enamora de ella y Yoon Jae cae en una rueda de desesperación porque no se atreve a confesarse, porque su hermano lo ha dado todo por él desde que se quedaron huérfanos y no ha seguido con su vida por mantenerle a él. Así que Yoon Jae cree que, callándose lo que siente, le "paga" a su hermano por todo lo que ha hecho por él, aunque eso le haga vivir como un pobre desgraciado. El hermano, también ha tenido su buena dosis de momentos malos pero es un buenazo de hermano, que siempre anda pendiente de Yoon Jae, que con lo perfecto que es su hermano, vive indigestado, pensando que por muy inteligente que sea y por muy bueno que sea en todo, jamás va a llegar al nivel de Tae Woong.

El intríngulis de este triángulo amoroso, es que, en el presente, sabemos que Si Won está casada, pero no sabemos con quien de los dos, van dejando pistas a lo largo de los capítulos, algunas verdaderas y otras más para despistar, en un deseo vivo de que te vuelvas loca intentando razonar con quien se quedo, por suerte, se queda con él que me gusta a mí, porque el otro me parecía un soso, que los dos son buenos, pero a mi me gusto desde el principio uno y me hubiera indignado que se quedara con el otro.

Los demás amigos también tienen su pizca de historia, la mejor amiga de Si Won, Mo Yoo Jung, fanática también de los grupos idols, aunque cambie de gustos según le de el viento, pero que es alguien leal a Si Won, con la que puede hablar de todo y que siempre está ahí para ella, ambas muestran una camaradería maravillosa que a mi me encanto, este personaje dio una escena que logró hacerme llorar como hacia tiempo que no lloraba, porque me sentí muy identificada. Después tenemos a Kang Joon Hee, que es el mejor amigo de Yoon Jae y que con Si Won tiene una relación preciosa de esas en las que ambos se convierten en confidentes del otro, Joon Hee es un chico inteligentísimo, el que más después de Yoon Jae y que está enamorado de este. Me gusta la naturalidad con la que se muestra lo que Joon Hee siente, porque independientemente de que le guste una chica o un chico, lo que el experimenta es amor y no tiene nada de diferente del que puede sentir una chica como Si Won, también que no lo convierten en tema capital, es una más de las historias, porque ser gay es algo que hay que ver con normalidad ni mas ni menos. Al grupito se une uno nuevo que viene de Seúl, Do Hak Chan, que tendrá una relación con múltiples altibajos con Yoo Jung y es que el chico está obsesionado con el porno, pero es incapaz ni de mirar a una chica real y mucho menos de comportarse con normalidad ante una. Además no faltan las bromas porque el actor que lo interpreta fue uno de esos idols de los 90 y claro, no pierden la oportunidad de hacer referencias. El último amigo es el clásico gracioso que todo grupo de amigos tiene, Bang Seong Jae, que es el que menos relevancia tiene en la historia.

Este drama es perfecto para conocer un poco más como es la vida en Corea y sobretodo para recordar como eramos y como somos ahora, los problemas que de adolescentes magnificábamos y que ahora de adultos comprendemos que no eran más que una minucia, la nostalgia de un pasado que ya se nos ha escapado. Las canciones, las modas, las series imperdibles, esa amistad inquebrantable, esa forma de vivirlo todo con tanta intensidad. Yo no viví mi adolescencia en los 90, sino en los primeros años del 2000, pero aun así, he visto tantas cosas con las que sentirme identificada, que sufrí una abducción a esta historia y en apenas un par de días me la vi. Es muy, muy recomendable, la nostalgia te invadirá, pero merece la pena, mucho.