24 de abril de 2019

Sungkyunkwan scandal



Capítulos: 20 (más de 1 hora)
Año: 2010
Sinopsis: Era Joseon, finales del s.XVIII, Kim Yoon Hee es una inteligente joven que debe esconder su condición bajo ropajes masculinos, para poder trabajar y mantener a su empobrecida familia. Cuando Lee Sun Joon la descubre en medio del examen para entrar a Sungkyunkwan, haciéndose pasar por otra persona, la obliga a realizar el examen con su verdadero nombre, que en realidad es el de su hermano. Así, ambos entran a formar parte de la prestigiosa escuela, donde coincidirán con el arisco Moon Jae Shin y el divertido Go Yong Ha. Mientras se enfrenta a los retos académicos, Yoon Hee tendrá que hacer lo que sea para esconder su verdadera condición, provocando a la vez toda clase de enredos y malentendidos.



Un drama que empieza curioso, creo que es el primero que veo de época en que una chica se disfraza de chico, teniendo además razones serias para hacerlo, pero a la mitad se vuelve aburrido y tedioso. Mi única razón verdadera para verlo es uno de los personajes, que me ha tenido loca todo el drama.

Kim Yoon Hee, a partir de aquí, Kim Yoon Shik, es una chica de clase baja que se disfraza de hombre para poder trabajar, dado que en esa época o eras esposa o gisaeng y no había muchas opciones y menos para una chica tan lista como Yoon Shik, que lee y escribe y tiene una gran memoria. Todo eso lo aprovecha haciendo copias de libros, escribiendo cartas, etc. Cuando el hombre que la tiene contratada le comenta que, por hacer un examen en lugar de otra persona, podría ganar mucho dinero, Yoon Shik no se lo piensa mucho, necesita dinero para pagar las medicinas de su hermano y sobretodo para saldar una deuda, pues de no hacerlo el hombre al que le debe pretende convertirla en su amante como pago. Así que acepta, pero es descubierta por otro postulante y entre la espada y la pared le toca hacer el examen con su "nombre" y acaba siendo admitida. Aunque está asustada, si se enteran de que es mujer dado que la educación para ella está vedada la ejecutarán, aun así se siente emocionada por poder estudiar y sacarle provecho a sus capacidades.

Lee Sun Joon es el perfecto e inteligente hijo de uno de los ministros más prominentes del país, quien en secreto gobierna realmente, porque tiene más poder que el rey. Sun Joon nunca se ha salido del tiesto, es honorable y obsesivo con las normas y su cumplimiento, además de un tío sequísimo, que parece que lleve un palo metido por el culo, de lo rígido que es. Este chico tan apegado a los valores tradicionales al ver a alguien haciendo el examen por otra persona, no se conmueve al saber que lo hace por un apuro económico y acaba poniendo en una situación complicada a la protagonista. Ya en Sungkyunkwan, se convierten en compañeros de cuarto, a pesar de que pertenecen a distintas clases, ella es de clase baja mientras que él viene de una familia noble y poderosa de rancio abolengo, que forma parte del partido Noron.

En ese mismo cuarto cae el caballo loco, como le conocen todos a Moon Jae Shin, el alma real de esta historia. Un chico taciturno, que finge que es un vago que solo piensa en escaparse de la escuela para ir a cualquier antro a beber y apostar. Pero en secreto, es un enmascarado que intenta poner de manifiesto la corrupción de la clase política del país. Su familia pertenece al partido Soron, rivales irreconciliables de los Noron, así que tener que soportar en su cuarto a Sun Joon, es un ejercicio de paciencia demasiado grande para él. Jae Shin además está peleado con su padre, porque su hermano murió por querer cambiar las cosas y el padre calló para no perder su puesto. Este hecho le ha marcado profundamente y está decidido a hacer lo que sea para revelar tal crimen y las razones que hubo detrás del mismo. El personaje es el que mejor está definido de los cuatro protagonistas, porque además de tener que ocultar esa amargura que le quema por dentro y le impide relacionarse con los demás, sufre porque descubre que Yoon Shik es una mujer y se ha enamorado de ella, pero no puede revelar esos sentimientos, porque sabe que si todos se enteran, ella acabara muerta, así que se dedica a ser su sombra y protegerla siempre. Que encima el pobre tenga que aguantar que ella se fije en el sosainas de Sun Joon, es un sufrimiento extra y realmente innecesario, creo que Jae Shin tenía más cosas en común con Yoon Shik que el otro, ademas de que si muchas veces ella se salva del peligro es por él. Del punto tierno, ingenuo y adorable que es que, cuando ya sabe que es una chica, el pobre tenga un hipo que no puede ni controlar de lo nervioso que se pone ya ni hablo, porque es para comérselo. Me ha tenido todo el drama babeando por él, preocupada de lo que pudiera pasarle, que hombre tan alucinante, guapo, valiente y bien plantado.

Por último está el mujeriego Go Yong Ha, un chico tremendamente guapo, cínico y avispado, que está seguro desde el principio de que Yoon Shik es una mujer y se dedica a ponerle trampas, supongo que por simple diversión. Un tío un poco raro, porque no se sabe hasta bien entrada la historia si va o viene, ni de parte de quien está. Pero que resulta ser el amigo más leal que podría tener Jae Shin, al que quiere más que a su vida.

En la cuestión romántica todo está muy demorado, mientras que Jae Shin se entera relativamente "pronto" de quien es realmente Yoon Shik, a parte de la tensión sexual, sufre por ello, saber que alguien es una mujer y tener que amarla en secreto porque si todos se enteran ella morirá debe ser una agonía indescriptible. Lo cual deja en comparación en pañales como se siente Sun Joon que cree que le gustan los hombres y tarda 16 capítulos en saber que es una mujer. Se que en esa época estaba justificada esa sensación de sentirse anormal por tener gustos contra natura, pero es que Jae Shin me parece que lo pasa peor, porque Sun Joon decide alejarse e incluso casarse esperando que se le pase, mientras que el otro sabe que no puede dejarla sola, hay un grupo en la escuela que intenta deshacerse de Yoon Shik y sabe también lo que le espera a ella si la descubren y encima está su otra identidad, con la que se juega el pellejo noche tras noche. En fin, que entre que Sun Joon se entera tarde y que Jae Shin demuestra una clase amor que no conoce barreras y que la protagonista parece más interesada en estudiar y cumplir cierta misión que el rey les da, me parece que en los cuatro capítulos que quedan, la relación amorosa está increíblemente forzada. Además de que todo se acelera porque claro, el drama se acaba y hay que resolverlo todo. Por eso les sale ese "final" tan sin sustancia, donde varios personajes desaparecen y varias de las cosas que se habían planteado se quedan sin resolver o directamente se resuelven fatal.

El drama empezó bien, pero a la mitad el ritmo decrece y no pasa nada, todo el rato es el grupo del malo, el erudito jefe, que intenta romper al grupo de Yoon Shik, logrando por un lado que Sun Joon se vaya con los Noron y que ella sea expulsada, porque es de clase baja y por tanto como se le ocurre que puede estudiar allí. Llega un punto que es un rollo, porque al malo los planes nunca le salen bien, algo que está muy claro porque si ella se va de la escuela se acabo la historia, los ayudantes que tiene este malo son tan inútiles, que de hecho te hace preguntarte como puede ser el erudito jefe aun con las pirulas que lía. El hecho de que se entere en el último capítulo que Yoon Shik es una chica, tampoco sirve de nada, porque ya es demasiado tarde para que saque ventaja de ello. Su padre mismo se encuentra con Yoon Shik varias veces y no reconoce en ella a la chica cuya familia le debe dinero y a la que quería convertir en su concubina, absurdo.

Hay otro asunto que tampoco tiene sentido que le den tantas vueltas para lo que hacen al final. El rey está decidido a recuperar más poder, para ello necesita una carta del anterior rey en la que revelaba que había matado a su hijo, padre del rey actual, por una conspiración de los Noron, con esa carta el rey pretende atarles en corto para que le dejen hacer las cosas a su manera y les encomienda la misión de hallarla a los cuatro protagonistas. Después de capítulos y capítulos, por fin Yoon Shik la encuentra pero de nada sirve, porque el documento acaba destruido y encima tienen los bemoles de restarle culpas al padre de Sun Joon porque claro, sino como se iba a quedar con la protagonista (cuyo padre había muerto por proteger dicha carta). No hay quien se crea que el padre Sun Joon, al que todo el mundo le tiene respeto y miedo, porque es quien gobierna realmente porque tiene el poder, tuvo una participación residual, pago a quien lo hizo para que se callara nada más, mientras que el cerebro que complotó todo es el padre del erudito jefe, un tío muy malo pero que teme y respeta al padre de Sun Joon y dudo que sea solo porque tiene un puesto más importante que él, ese tipo de personas solo respetan a alguien que sea aun más poderoso que ellos. Así que la milonga de yo sabía que ese documento existía, pero solo pague al ejecutor para que callara que mi aliado fue quien le ordeno dar muerte a quienes lo custodiaban, para proteger a dicha persona y al partido Noron no hay quien se la trague. Claro que en el drama si se la creen y solo el malo que ordeno las muertes acaba siendo juzgado, el papi de Sun Joon, que sabía de sobra lo que había pasado, sale indemne de todo. Si claro, anda ya, todo para que su hijo y la protagonista, cuyo padre fue uno de los asesinados y de cuya muerte estaba enterado el padre de él, puedan estar juntos sin que ronde la palabra asesino entre ellos. La chapuza que es que ella siga paseándose por ahí vestida de hombre, hasta siendo profesor, les debe parecer graciosa, por el tono que le dan a la escena, pero no yo no le encuentro la gracia ni el sentido por ninguna parte.

13 de abril de 2019

When it's at night



Capítulos: 17 (más de 1 hora)
Año: 2008
También conocido como: When night comes, Everyday night, Night after night
Sinopsis: Heo Cho Hee trabaja para la Administración del Patrimonio Cultural de Corea, siempre está en la búsqueda y protección de dichas obras de arte, lo que gente no sabe es que es hija de un famoso ladrón de antigüedades. Por otro lado, está el experto en arte Kim Bum Sang, que es atractivo e inteligente y no tiene problemas en valorar obras de arte hayan sido adquiridas o no por las buenas. Tras una serie de malentendidos, Bum Sang es contratado por la Administración de Patrimonio y tendrá que trabajar con Cho Hee, a pesar de que no pueden soportarse el uno al otro.



Una drama normal, no muere hasta el apuntador, a veces es entretenido y hasta interesante y la pareja no está mal, el problema aquí es que, en general, los personajes secundarios no valen un pimiento y deslucen la historia, tanto los malos como los buenos porque son bastante simples y tontos.

Heo Cho Hee es una inspectora (o algo así) en una agencia del gobierno dedicada a la Administración y Preservación del Patrimonio Cultural de Corea. Cho Hee es muy buena en su trabajo, meticulosa, tozuda e inflexible, su objetivo es que las obras de arte estén donde deben estar: en los museos. La razón de que sea de esta manera, es su padre, famoso ladrón de antigüedades, que se pasaba el día desapareciendo o en prisión. Lo que ha provocado que Cho Hee a pesar de que es una chica buenísima e inteligente, sea incapaz de tener relaciones sólidas con los demás, incluido su hermano menor, que la idolatra. Por eso nunca le ha dicho a un compañero de trabajo, un policía guapísimo, que está enamorada de él. Lo de su padre lo sabe su directo superior, que era quien siempre acababa deteniendo al padre, eso creo una relación de padre e hija entre ellos, Cho Hee le respeta y admira profundamente. Pero el padre lleva desaparecido 7 años y la protagonista sigue intentando encontrarle, piensa que en la búsqueda de objetos antiguos robados quizás surja alguna pista de su padre. En una de esas misiones, en Japón, conoce a un hombre que es todo lo contrario que ella.

Porque Kim Bum Sang es mujeriego, abierto, divertido y relajado. Un hombre inteligente, que es experto en arte y trabaja en una universidad y hasta tiene un programa en televisión. Aunque no le va mal en lo suyo, es un experto reputadísimo al que los ricachones buscan para que les valores obras de arte (las hayan conseguido lícitamente o no), le podría ir aun mejor pero claro, no tiene los contactos ni el dinero que otros si. El tipo es curioso porque sabe que es listo, que es guapo y que tiene esa labia que atrae a la gente, pero finge ser el hombre más modesto del mundo mientras explota todas esas cualidades. En cuanto a su trabajo, le apasiona, pero no tiene ningún escrúpulo en trabajar para millonarios sabiendo que las obras que han conseguido suelen ser robadas, precisamente en un trabajo para uno de estos hombres, el malo malísimo de esta función, conoce en Japón a Cho Hee y ambos se caen mal de inmediato porque no pueden ser más opuestos.

Una que es todo honorabilidad y deber y el otro que se dedica a explotar sus cualidades sin mirar más allá, chocan sin cesar y más cuando ingeniosamente Bum Sang logra recuperar una antigüedad muy valiosa que piensa entregar al rico, pero Cho Hee le pone la zancadilla y provoca que no tenga de otra que entregarla al museo. Entonces todos piensan que es un filántropo y como además es muy bueno en lo que hace, la agencia para la que trabaja Cho Hee le contrata, ya está armado el lío. Porque él no le perdona lo que he tocado hacer por su culpa y ella sabe que es un oportunista sin pizca de conciencia.

Si digo la verdad, aparte de las aventuras que viven recuperando cosas y con un misterio que presentan, lo que más vale de la historia es la dinámica que va surgiendo entre los protagonistas, son como el agua y el aceite. Bum Sang no entiende lo obsesiva que es ella con recuperar el patrimonio robado, hasta que se entera del motivo y alucina y ella no comprende como puede ser tan poco patriota y aceptar trabajar para millonarios que está claro que han conseguido de forma ilegal las antigüedades. Como en todo dorama donde los protagonistas se llevan al principio fatal, vamos viendo como acercan posturas, como surge entre ellos una amistad, un compañerismo y al final una admiración mutua por el trabajo del otro, que les lleva a enamorarse, los opuestos se atraen y Kim Sun Ah sabe bien como tener química con sus compañeros, él también está estupendo, nunca había visto a este actor en acción pero su personaje a parte de ser carismático, va aprendiendo lecciones y sin dejar de ser él, también cambia, igual que ella. Por cierto, aunque haya historia de amor, no es el eje principal de la trama, por lo que aunque tienen algunas escenas bonitas, no es la gran historia de amor, pero lo que se ve está bien, además él se enamora antes que ella.

Mientras la relación de los protagonistas va surgiendo, el malo, un tal Presidente Jang, sigue por ahí haciendo de las suyas, es el único malo de todos que produce inquietud porque es el único listo, todos lo que trabajan para él, un grupo de mafiosos de medio pelo, dan vergüenza ajena de lo inútiles y estúpidos que son. Claro que el bando de los buenos, si descartamos a los protagonistas, al poli guapo y al jefe de Cho Hee es que no pueden ser más tontos. Desde la compañera de la protagonista que tiene un complejo de princesa, el cual le lleva a creer que tanto Bum Sang como el poli están coladitos por ella... sin comentarios (es que la chica es el colmo de lo besuga y descerebrada que es, dándoselas encima de ser un partidazo) hasta los policías que son unos mantas. Esta parte es de las que más cojea, porque no van a acorde al resto de personajes y desdibujan la historia principal.

Si no cuento a los protagonistas, lo más interesante es que hay un personaje misterioso, un tal Hong Gil Dong, que se dedica a robar antigüedades previamente robadas y las dona al museo, es una trama que aunque adivine quien era el personaje, está entretenida, lástima que cuando se descubre quien es, el personaje en cuestión pierde esa astucia que le había caracterizado, si es que hasta eso lo estropean.

Como digo no es un gran drama, tiene sus pegas, las partes en que salen los compañeros cargantes de Cho Hee y los malos ineptos las he saltado, pero se deja ver. Kim Sun Ah es lo mejor del conjunto, su personaje es tan listo, tan independiente y fuerte, sin dejar de ser una persona amable y buena, que merece la pena solo por ella, es curioso lo denostado que está este dorama, es difícil encontrar opiniones sobre el, porque no ha sido muy visto.

7 de abril de 2019

Age of youth


Capítulos: 12 (más de 1 hora)
Año: 2016
También conocido como: Hello my twenties!
Sinopsis: Cinco chicas universitarias viven juntas en la residencia "Belle Epoque", mientras se enfrentan a los primeros retos como adultas forjaran una gran amistad, a través de ellas veremos como es la vida de los jóvenes que están en los veinte.



Un drama mas cercano a la forma de contar una historia de Answer me que a otras series más rosas (y algo irreales) donde se habla del proceso de maduración y los problemas que surgen del mismo. Aunque si comparo me gusta mucho más como cuentan la historia en Answer me (la del 97), que aquí, los personajes, salvo un par, me han parecido bastante tópicos.

El grupo está formado por la veterana Yoon Jin Myung, que tiene 28 años y estudia administración de empresas, su personaje es el primer tópico, es la clásica chica que trabaja en mil sitios para mantenerse a si misma y a su familia, sin tiempo para vida personal ni nada que no sea trabajar y estudiar. Es cierto que a su rol le dan un toque, con el hecho de que este harta de tener que trabajar como un burro para pagar las cuentas del hospital de su hermano y que desee que este se muera (está en coma profundo o algo así), pero el personaje se contiene tanto, es tan poco expresivo que aunque me da pena lo que le pasa, no acabo de empatizar con ella.

Le sigue en edad la sexy y glamurosa Kang Yi Na de 24 años y que también estudia administración de empresas. Para mi es uno de los mejores personajes de la serie porque no es el típico personaje, quiero decir que en los dramas normalmente la chica sexy, que los vuelve a todos locos con su cuerpazo y solo piensa en vivir bien siempre es pintada como una bruja avariciosa. Yi Na no es así, le gusta tener una vida fácil, porque sabe que la vida es corta, pero no hace daño a nadie, ni es mala ni cruel, puede que tenga envidia a veces, pero también es casi la única del grupo que dice las cosas como son, sin ambages, el tipo de cosas que la gente se calla porque no se atreven a decirlas y que viendo el drama tú piensas, pues ella les pone voz. Me ha parecido original su personaje, porque tiene más de una sorpresa escondida por ahí que explica a la perfección porque es como es, además no muestran lo que hace como algo negativo per se sino que dan una perspectiva más moderna y abierta.

Después está la mega obsesionada con su noviecito, Jung Ye Eun, de 22 años, estudia nutrición (e irónicamente está todo el día intentado perder peso para estar más delgada), su personaje es tan tópico, la chica enamoradísima de su novio, que solo piensa en él y que finge que no se entera de que él no la quiere ni la mitad que ella a él, que se pasa el día arreglándose para él, que tiene miles de detalles con el novio y se calla todo el rato lo frustrada que está por como se porta el chico con ella, dejando que el idiota la utilice todo el tiempo. Se que es una representación veraz de una relación malsana, de principio a fin, pero es que Ye Eun no tiene dignidad, le cuesta mucho atreverse a ser más independiente, parece que si no tiene al novio no tiene nada y eso que Yi Na le dice que es un gran partido y podría tener a alguien mucho mejor, la mayor parte del tiempo no me gusta este personaje por como se deja pisar por el novio. Menos mal que despierta.

El otro gran personaje de esta historia, aunque no lo exploten como deberían es Song Ji Won de 22 años, estudia periodismo y es junto a Yi Na la razón por la que he acabado de ver el drama. Ji Won representan un personaje que en algunas características se ha visto antes, es muy habladora, impulsiva, inquieta, fiestera pero hay algo en ella que la hace sobresalir de la media: está obsesionada con el sexo. Es el opuesto de Ye Eun, ella no quiere un novio para vivir una historia de amor, lo que quiere es experimentar los placeres del sexo y no lo dice una vez sino muchísimas a lo largo de la historia. Si ya a veces es difícil que el personaje femenino confiese abiertamente lo que siente y como lo siente (cada vez pasa menos esto en los dramas por suerte), que una chica diga a las claras que lo quiere es acostarse con un tío para dejar de ser virgen, sin que medie el amor, sino simplemente disfrutar del sexo, es una revolución total en los dramas coreanos. Eso y el humor del que hace gala, un poco cochino, demuestra que si señores, las mujeres pensamos en el sexo y hacemos chistes guarros y escatológicos también, no es exclusivo de los hombres.

Y por último esta la benjamina del grupo, Yoo Eun Jae, de 20 años, una chica de pueblo que es timidísima y apenas habla (el último tópico). En el primer capítulo por su forma de ser, las otras chicas se aprovechan de ella, bueno en realidad no la tratan excesivamente bien y Eun Jae es una chica muy serena, que se guarda todo lo que no le gusta dentro pero claro, llega un momento en que explota y suelta todo, eso hace que cambie la relación con sus compañeras de piso. Me parece curioso que estudie psicología, supongo que es la forma que tiene el personaje para ir entendiendo a los demás y sobretodo para atreverse a ganar ella misma confianza. Igual que con el resto de personajes más tópicos del drama, hay más de lo que parece a primera vista.

Aunque las cuatro primeras se conocen desde hace un tiempo, dan a entender que aunque hablan no tienen una relación muy fluida, hasta que llega Eun Jae y entonces las vemos forjar un vínculo de amistad muy bonito, que es la otra cosa que me ha gustado, como muestran la amistad femenina, porque puedo asegurar que existe y no tiene nada que envidiar a la masculina, la forma como todas se van acercando, en esto ayuda mucho Ji Won que es el alma del grupo, apoyando y hermanando, de tal manera, que si alguien se mete con alguna o le ocurre algo malo, las otras cuatro están a muerte con ella. La historia no presenta grandes conflictos, cuentan la vida de gente normal a la que de cuando en cuando le pasan cosas un poco fuera de la media (como a todo el mundo), pero no lo hacen con la soltura que se ve en Answer me 97, porque al contrario que en esa, no todas las protagonistas de esta son tan interesantes.

Hay segunda temporada, así que aunque este drama no me ha fascinado, se que tiene multitud de fans por ser menos convencional que la media, puede que si vea la segunda temporada solo por Ji Won, porque parece que van a centrar la historia más en ella (por lo que me han contado), en esta primera temporada siento que el personaje no tiene el peso que merece y por eso sabemos poco de ella, al contrario que del resto. Pero advierto que no es ni de lejos tan buena serie como dicen, tiene tiempos muertos muy largos, lo que ha provocado que se me hiciera a veces lenta y aburrida. Además algunos personajes me sacaban de quicio a veces, especialmente Ye Eun y Eun Jae,  una con aguantarse todo y la otra con eso de callarse las cosas.

2 de abril de 2019

The guest



Capítulos: 16 (más de 1 hora)
Año: 2018
También conocido como: Hand, the guest | Son, the guest
Sinopsis: Un poderoso espíritu malvado llamado Park Il Do acaba con las familias de tres niños y desaparece. Veinte años después, estos niños ya adultos se reencontrarán, uno es el psíquico Yoon Hwa Pyung obsesionado con encontrarle, otro de los niños, Choi Yoon, se hizo sacerdote exorcista y por último, está la policía Kang Gil Yeong, quien descubre la terrible verdad tras la muerte de su madre. Cuando una serie de misterios asesinatos empieza a ocurrir con el sello de Park Il Do, los tres deberán unirse y luchar para destruir al espíritu, antes de que logre acabar con ellos.



¿No es maravilloso cuando una historia empieza con un tono terrorífico, siniestro, misterioso y lleno de secretos y no solo cumple con lo que promete sino que no deja un solo cabo suelto? Este drama está en esa categoría. Una ambientación curradísima, unos actores en estado de gracia y una trama que no pierde fuelle en ningún capítulo, hasta llegar a su apoteósico final.

La historia comienza hace 20 años, en una ceremonia para lograr buena fortuna celebrada por una familia de chamanes, en ella ocurren dos hechos destacados: el niño de la familia, Yoon Hwa Pyung descubre que es psíquico, puede ver y oír fantasmas, y un hecho extraño ocurre, un miembro de la familia es poseído por algo sobrenatural y acaba matándose. De pronto, Hwa Pyung empieza a actuar de forma extraña, llegándose a la conclusión de que ha sido poseído por el mismo espíritu, la familia celebra un ritual para liberarle y hasta traen sacerdotes, pero tan rápido como el espíritu aparece vuelve a desaparecer. Lamentablemente, se lleva por delante las vidas de la madre y abuela del niño. Ya adulto, Hwa Pyung cuyos poderes de psíquico fueron sellados en la ceremonia para exorcizarle, trabaja de taxista, pero no ha dejado de buscar al espíritu, quien se identifico como Park Il Do, está seguro de que volverá y quiere ajustar cuentas con él, pues tras perder a parte de su familia, su padre se largo de casa y solo le queda su abuelo. De pronto, una serie de misteriosas muertes le hacen darse cuenta de que el espíritu ha vuelto a las andadas, porque aunque no tiene sus poderes, al haber sido poseído es capaz de ver lo que hacen las personas que también son poseídas.

Buscando al mismo espíritu se encuentra el sacerdote Choi Yoon, quien es además exorcista, esto es porque su hermano, que también era cura, después de ver a Hwa Pyung de niño, regresó a su casa y masacró a su familia tras ser poseído, todos menos Choi Yoon, que se libró por los pelos, decidido a encontrar a su hermano y deshacerse del demonio que lo poseyó, Choi Yoon se ha esforzado mucho por llegar a ser exorcista, un trabajo agotador, desmoralizante y estresante, donde hay que tener una concentración y una fe enormes para no caer ante las tretas de los poseídos. Las escenas donde ocurren los exorcismos están muy curradas y realmente provocan inquietud, aunque a mi personalmente lo que más asco me da es como se apuñalan en el ojo, que grima.

El último vértice de este triángulo es una policía, Kang Gil Yeong, cuya madre también fue víctima de Park Il Do, Gil Yeong se hizo policía por ella, dado que su caso nunca fue resuelto y las pistas que se tienen de el son poquísimas. Cuando empiezan a producirse muertes extrañas donde individuos matan a sus familias y luego se suicidan apuñalándose el ojo derecho, Gil Yeong se sentirá desbordada al principio y cuando Hwa Pyung le cuente que es lo que ocurre realmente, le tildara de demente, lógico por otra parte, si alguien te dice que los asesinatos son obra de espíritus malignos también creerías como la poli que esa persona está mal de la azotea. Pero las muertes continuadas siguiendo el mismo modus operandi y sin más pistas siguen ocurriendo, así que Gil Yeong dejará a un lado su escepticismo para luchar contra ese mal sobrenatural.

Quizás uno de los mejores puntos de esta historia, aparte de la ambientación y el suspense, es la relación que se establece entre esos tres personajes, unidos sin saberlo desde la infancia por las muertes de sus familias a manos de Park Il Do, la posterior concatenación de hechos les lleva a tener que ir acercando posturas. Al principio, cada uno va a su bola y si te he visto no me acuerdo, pero luego comprenden que, como dice el dicho ,"la unión hace la fuerza" y dado el espíritu tan poderoso, tanto como para controlar a espíritus inferiores, al que tienen que enfrentar es mejor no hacerlo solos. Empiezan a colaborar a regañadientes y luego, el vínculo entre ellos se ha fortalecido tanto, que es emocionante como se preocupan los unos por los otros, como ya no es solo parar al espíritu, sino el temor a que alguno acabe muerto por culpa de ese demonio, ya han perdido tanto que no quieren perder más.

En el bando de los malos, sin contar a los poseídos, hay un personaje espantoso, que da casi más miedo que los propios espíritus, es una congresista, proveniente de una familia de mucho dinero, que está loca, una psicópata de lo peor, mala a rabiar y que desde que aparece no deja de ser un problema más, una sombra que se cierne sobre los tres protagonistas, por todo el poder que tiene y los pocos escrúpulos (por no decir que ninguno) a la hora de usarlo. No me gusta como cierran su historia, aunque sepa que eso es así muchas veces en la vida real, pero hubiera preferido otro final para ella. Sobretodo porque había medios para destruir su carrera política.

El resto es una conjunción de mística, rituales, pistas falsas, sorpresas, giros de guion, múltiples sospechosos, te hacen dudar de prácticamente todo el mundo, porque dejan claro que alguien está siendo el recipiente de Park Il Do y lo más inquietante de todo, que puede que esa persona ni sea consciente de que ha sido poseída. El capítulo final, que dura 1 hora y 20 minutos, está dedicado a cerrar con broche de oro, en el se revela toda la verdad, sin dejar ni un cabo suelto, de verdad que lo resuelven todo con gran maestría, explican muy bien los puntos ciegos que habían sembrado en los capítulos anteriores, esta vez mis expectativas fueron ampliamente satisfechas, esto es un final, sí, señor. Recomendadísima.