Personal taste

Capítulos: 16 (más o menos una hora)
Año: 2010
También conocida como: Personal preference
Sinopsis: Park Gae In es una diseñadora de muebles e hija de un famoso arquitecto, quien diseñó la casa donde ella vive, la cual es una joya de la arquitectura. Como persona, Gae In es una chica ingenua y desastrosa, a la que su novio abandona por su sofisticada amiga. Pero ahí no acaba todo, un amigo pone como aval a una deuda su casa y para no perderla, Gae In debe alquilar una habitación. Jeon Ji Ho es arquitecto, en contraste con Gae In, es alguien pulcro y muy ordenado, necesita ganar un proyecto para salvar su pequeña empresa, para ello se fija en la casa de Gae In como modelo para su proyecto. Al saber que ella renta una habitación, decide alquilarla, como ya habían tenido encontronazos antes, ella cree que él es gay, así que le acepta sin más problemas, hasta que empieza a enamorarse de Ji Ho, pensando que es un imposible.



La racha de doramas que me gustaban no, que me encantaban, se tenía que romper, pero podría haber durado un poco más, pero me tope con este pestiño, escuchando, en general, buenas cosas sobre esta historia, decidí verla, porque no haría caso de los que dijeron que no valía la pena. Que desperdicio de tiempo.

Jeon Ji Ho es un brillante arquitecto, dueño de una pequeña empresa, pero que por muy buenos que sean sus proyectos, siempre acaba perdiendo ante el conglomerado de Han Chang Ryul y su padre, este último es un tramposo, que además dejó en la calle a Ji Ho y su madre cuando el padre murió, quedándose con todo lo suyo, hasta su casa. Pero ahora se presenta la oportunidad de diseñar una galería y descubre que el concepto que más les gusta a los dueños es una casa tradicional erigida por un afamado arquitecto, el cual rechazo el proyecto, así que sabiéndolo y jugándose con ello que su empresa vaya o no a la quiebra, Ji Ho decide vivir en la susodicha casa para poder tener referencias, deseo que se le cumple cuando descubre que la hija, a la que ya conocía de antes por varios malentendidos, alquila una habitación. Él jamás, jamás le dice que es gay, es ella la que lo piensa, pero él cree que solo le acepta porque necesita el dinero.

En contraste, Park Gae In es un desastre de persona, se viste de una forma horrible, mezclando ropa de una forma espeluznante, además es una persona sucia, pero sucia de verdad, es torpe hasta la extenuación, ¿cuántas veces se le puede caer una taza o algo de cristal y cortarse a lo largo de la historia? Además es una chica tonta, pero tontísima, más simple que el mecanismo de un botijo. Da pena la chica porque el padre no le hace ni caso, de hecho, pasa bastante de ella. Además el novio la deja tirada de pronto y al día siguiente en la boda de una de sus amigas, se da cuenta de que el novio es su ex, por cierto que además este es el rival de Ji Ho, Chang Ryul, quien había estado saliendo con la "amiga" a espaldas de Gae In. Y por si no fuera poco, para rematar, un amigo que trabaja con ella, contrae una deuda y pone como aval la casa de Gae In, que me dirán ustedes como alguien puede hacer eso sin el consentimiento de la dueña, en fin, que solo es una excusa para que se produzca la convivencia entre Gae In y Ji Ho.

Gae In se enamora enseguida del protagonista pero porque es lo más normal, aunque él es seco con ella, también es una persona decente, que intenta hacerla mejorar, que agarre autoestima para que no se deje pisar, porque es que siempre se deja mangonear de todos, parece no saber que tiene derecho a decidir sobre su vida, una chica que ya roza la treintena, lo cual es preocupante. También la regaña todo el tiempo, porque ella tiene una mala costumbre de andar diciendo por ahí que él es gay y a Ji Ho le pone negro, porque claro no es gay pero se calla para poder quedarse en la casa, a la que se escapa también porque en su casa tiene una pesada metida, que le persigue todo el tiempo y esta empeñada en quedarse con él y hasta se auto proclama la prometida. Todo esto con el consentimiento de la madre de Ji Ho, que parece ver normal que la tarada esta no deje en paz ni un segundo al hijo, que jamás la mira. Aunque la madre también es boba.

De Ji Ho me creo menos que se enamore, es que es ella es tan simple y tan pava, todo el tiempo. Más bien parece que Gae In le da pena y por eso busca ayudarla, aunque también le colme la paciencia con su eterna estupidez. Es una de esas parejas que no te crees ni por medio segundo que vayan a durar, ni siquiera que de verdad sean una pareja. Me pregunto a quien se le ocurre juntar a dos personas que no tienen nada en común y que en la vida real ni intercambiarían una sola palabra.

Luego está la cerda de la amiga, Kim In Hee, que está por casarse con el novio de Gae In, sin tener la decencia de decirle a las claras que ella y Chang Ryul se quieren y se van a casar. Luego se acaba por anular la boda y tan pronto como estaba enamoradísima, ahora no le puede ni ver. Y se fija en Ji Ho, que al igual que con la otra pesada, ni caso le hace, de hecho, ella hace un montón de cosas para seducirle y él ni caso, hasta la empuja cuando In Hee se lanza a besarle. La cara de hastío que pone cada vez que la ve es buenísima. In Hee está segura de que no es gay y como ve que a Ji Ho parece interesarle Gae In, más se empeña en conquistarlo. Le tiene una envidia a la pobre chica que no se muy bien de que, se supone que es porque la otra tiene más suerte, pero si es suerte que tu padre te ignore y te trate con desapego y que tu novio te ponga los cuernos con una de tus amigas, pues no quiero tener esa suerte nunca. Además que tampoco comprendo porque le hace eso, porque dicen que cuando In Hee se quedo huérfana, Gae In la trajo a vivir a su casa y la trataba como si fuera una más. Después de un tiempo y con la influencia de Ji Ho, Gae In le dice un par de cosas a In Hee, que pone cara de sorpresa total, como si le hubiera dicho algo horrible, cuando eso es algo que, cualquiera con dos dedos de frente, le habría dicho desde el momento que descubre la infidelidad, en realidad, cualquiera le habría dicho muchas cosas más. Del pelele del novio ni hablo mucho, porque el tío se deja manejar todo el tiempo por In Hee y anda metiendo su cuchara donde nadie le llamó.

Que aburrimiento he pasado viendo esto, se que debería haberlo dejado cuando vi que no me estaba gustando, pero suelo acabar las cosas aunque no me terminen de gustar, a no ser que no lo aguante más. El problema del dorama es que tiene picos de interés, pero luego se desinfla, el primer capítulo no estuvo mal pero no me enloqueció, sin embargo, parecía que a partir del segundo iba mejorando algo, porque es cuando empiezan a vivir juntos. Las situaciones equivocadas porque ella cree que él es gay no están mal, pero son bastante tópicas. Luego se estanca y remonta algo cuando Ji Ho le confiesa que no es gay y que la quiere, para volver a caer en picado de nuevo, ya el remate es la situación absurda de los últimos capítulos, donde meten algunas morcillas para alargar lo que ya no tenía sentido que se alargase. Si hubiera sido el dorama más corto y ella menos pánfila, habría mejorado mucho, esto no da para 16 capítulos como mucho para 10.

Admito que me llego a dar igual como acabara, solo quería que terminara, ya solo la veía por Lee Min Ho, al que perdono que escogiera salir en este bodrio porque su personaje es lo único rescatable.

Casi al final cuando se produce un malentendido y Ji Ho no busca a Gae In para arreglarlo, pensé que se había dado cuenta de que saliendo con esa chica tan tonta solo iba a conseguir más problemas y había desistido. Pero no, tampoco explican porque no aclara todo de inmediato, cuando él no es precisamente de callarse las cosas, sino que le gusta ir al grano. Más cosas incomprensibles en este dorama infumable. Tiene que ser el personaje gay (si hay uno que es gay de verdad y además uno de los pocos personajes que es un encanto de persona) él que les junte para que se arreglen a a veinte minutos de acabar el capítulo final. Un horror. Que nadie la vea, a no ser que quiera sufrir una agonía, yo intentare borrar de mi cabeza que la vi.