W

Capítulos: 16 (más o menos 1 hora)
Año: 2016
También conocido como: Two worlds
Sinopsis: Oh Yeon Joo es una residente de medicina de segundo año, algo insegura pero buena profesional, está enamorada platónicamente de Kang Chul, un joven rico, exitoso y guapo de su misma edad, lástima que este hombre sea solo producto de la imaginación de su padre, ya que este es el autor del webtoon más popular de Corea, "W", del que Kang Chul es protagonista. Sin saber como, Yeon Joo es transportada al mundo de "W" donde su relación con Kang Chul empezará a estrecharse, mientras realidad y ficción se dan la mano.



La mejor forma de definir este dorama es que es una pasada, visualmente es impresionante, la historia siempre está sorprendiendo y es el drama más come tramas que he visto en mucho tiempo, pero eso si, con sus reglas particulares, reglas que si las sabes, pueden ayudarte mucho a moverte en "W".

Oh Yeon Joo es doctora y como está en plena residencia tiene un superior que es un petardo, al que no le quede otra que aguantar, a mí particularmente me parece un idiota maleducado. Yeon Joo es una chica muy normal, con ciertas inseguridades sobre sus capacidades como médico, pero dispuesta siempre a ayudar. Ella como todos en Corea al parecer, está enganchada al webtoon de moda, "W", del cual es autor su propio padre, además Yeon Joo siente fascinación por Kang Chul el protagonista, que representa para ella un ideal romántico. Cuando de pronto su padre desaparece, ella se presenta en la casa donde este dibuja "W" con tal fortuna, que, sin comerlo ni beberlo, acaba dentro del mundo del webtoon y se encuentra con el mismo Kang Chul al borde de la muerte y al que ella le salva la vida, tras enterarse por uno de los ayudantes de su padre, que este pretendía matar a su protagonista.

Kang Chul carga con un pasado triste, su familia fue asesinada y él acusado del crimen, porque el arma que se uso es la misma que utilizó el protagonista para ganar una medalla en los Juegos Olímpicos, tras salir de la cárcel por falta de pruebas, decide hacerse un nombre, ganar mucho dinero y así crea "W", un canal de televisión dedicado a esclarecer crímenes sin resolver con la esperanza de encontrar al verdadero asesino. Por supuesto, Kang Chul no sabe nada de su "realidad" y cuando una desconocida aparece de pronto ante él, siempre en el momento justo para salvarle la vida, empieza a interesarse en ella, a querer saber quien es realmente y porque le ayuda. Kang Chul es diferente a la protagonista en el sentido de que es muy seguro de si mismo. También es inteligente y se siente capaz de todo, pero a la vez carga con la pérdida de su familia, el trauma que supuso ser acusado de tal crimen y un deseo atroz de que se haga justicia. Siente que Yeon Joo es la "llave de su vida" y está dispuesto a lo que sea necesario para mantenerla cerca y saber todo lo que ella sepa y eso lleva a que pasen mucho tiempo juntos y ambos se enamoren, lo cual traerá consecuencias en el mundo del webtoon y serán de las grandes.

El resto de personajes son más secundarios, está el padre de Yeon Joo, que por alguna razón que se desconoce hasta avanzada la historia, quiere matar al protagonista de su webtoon, el actor debe jugar un rol muy difícil, porque al ser el creador de la historia, es también el causante de las desgracias que aquejan a Kang Chul, que no son pocas y no puedo decir más porque le quito toda la gracia. Luego está el guardaespaldas personal y amigo de Kang Chul, Seo Do Yoon, que le enseño artes marciales y que es su confidente y su mejor aliado, si Kang Chul está bueno, este chico no se queda atrás, es el chico majo de Thumping spike, aunque aquí sale más serio pero igual está para comérselo. Ojala le hubieran dado más cancha a su personaje, que sale menos de lo que yo me esperaba. También está la amiga de la infancia de Kang Chul y asistente de él, Yoon So Hee y que, en cuanto aparece por el webtoon Yeon Joo, se convierte en un cero a la izquierda. Está enamorada de Kang Chul pero solo puede hacer el papel de celosa porque, para él, es como si estuviera pintada en la pared y cuando entra en escena la protagonista, ni os cuento. Es uno de esos personajes estorbantes y creo que podrían haberla sacado mucho antes de la historia, para hacer de extra no era necesario que saliera, además de que es irrelevante para la historia. Y por ultimo están, por un lado el fiscal que quería encerrar a Kang Chul, el clásico tipejo hambriento de poder que busca un caso relevante para saltar a la política, su carrera va más o menos porque como Kang Chul se libró de la cárcel y ahora se dedica a impartir justicia buscando resolver crímenes, él ha caído en una espiral de odio y envidia, sigue pensando que Kang Chul es culpable, pero más que nada por pura necedad. Por el otro lado, está ese asesino que ronda durante toda la historia y que es un puñetero. Así tal cual. Y del que tampoco puedo hablar mucho porque tiene reservadas muchas sorpresas, su objetivo vital es impedir que Kang Chul tenga su final feliz.

A pesar de ser un drama de fantasía, tiene sus puntos realistas, a quien no le ha pasado como a la protagonista que se haya enamorado del personaje de un libro, de una serie y hubiera deseado saltar dentro de la historia para poder conocerlo. Y aunque Kang Chul sea un personaje de ficción, es alguien que sufre por pensar que no controla su destino, sino que le toca someterse a los designios de alguien superior a él, pero sobretodo, el pesar que le causa saber que ha sufrido toda su vida para nada, ¿qué fin puede tener una vida que ha sido controlada desde el principio? Que levante la mano el que no haya pensado en alguna ocasión que su existencia no tiene ningún objetivo que perseguir y que daría lo mismo que estuviera en el mundo o no.

Este drama mezcla varios géneros, drama, romance, acción, misterio y algo de comedia, no siempre con acierto. En mi opinión, los ocho primeros capítulos mantienen muy bien el equilibrio, es la segunda parte de la historia la que flojea pero creo que también es porque se ve lastrada porque la primera parte tiene tan buen ritmo, todo está tan bien encajado y pensado, que en comparación la segunda parece más hecha sobre la marcha, que es lo que habrá sido porque el dorama se rodaba según acababa los guiones la autora. Lo cual hace que la balanza que estaba tan bien equilibrada al principio, luego se descontrole y se centre mucho en un aspecto de la historia y descuide lo demás. Si hubiera sido una historia con ritmo y similar regularidad de principio a fin sería una obra maestra. Aun así valoro mucho más que se haya buscado ofrecer algo original y que te hiciera romperte la cabeza pensando con que te saldrían en el siguiente capítulo. Es la clase de dorama que no abunda, porque nunca sabes por donde va a tirar, cuando ya te has montado una teoría sobre que está pasando y porque pasa, ves el siguiente capítulo y se te cae como un castillo de naipes, realmente engancha esa desazón que provoca no saber que va a pasar y como una es curiosa, me tuvo muy pendiente.

Como he dicho más arriba el mundo del webtoon tiene sus reglas y saberlas es tener un as bajo la manga y cuando Kang Chul, que es tan inteligente, descubre lo que está pasando, puede por fin tomar las riendas de su destino y no permite que lo manejen, él y solo él se encargara de buscarse su propio final feliz. Esto sucede ya en la segunda parte, que aunque diga que no es tan buena como la primera, con todo este vaivén de unos y otros, es emocionante porque esperas a ver cual será el siguiente paso de Kang Chul para salir indemne de donde está metido. Además me gusta el hecho de que él deje de ser un títere, se plante y opte por ser quien maneja la situación y no al revés. He de admitir que llega un punto en que con tantas idas y venidas, que si ahora el mundo de ella, que si ahora el mundo de Kang Chul, me acabe perdiendo un poco, es de esos doramas en los que tienes que estar atento a la historia desde el minuto uno, porque sino luego no te vas a enterar de nada. Cuando llegue a ese punto de incomprensión decidí que a partir de entonces disfrutaría de lo que quiera que me ofreciese la historia.

La parejita es mona, sobretodo en la primera mitad que es donde más tiempo les dan para vivir su amor, luego nos dejan mucho tiempo a dos velas y claro, como que se estropea la cosa. No es de mis parejas predilectas pero hay química, hay ternura y también hay buenos besos. La historia con sus altibajos nunca pierde el interés, debe ser uno de los pocos dramas en los que no he pasado escenas, todo cuenta en "W". La recomiendo por la estética, por los giros de guion y por presentar algo novedoso que me tenía pensando y flipando a un tiempo.